26/2/14

en sintonía con Rocío Dúrcal

Es extraño. Ya no deseo volar. Me doy cuenta de que el cuerpo está hecho de barro cotidiano. Pesa.
Me molesta el dedo gordo. Necesita quiropedia.
Hoy martes, no me despertó el camión del agua con su escándalo de botellones por el ascensor
y tengo sed.  
la Guarimba no distingue entre simones y simones
le da más importancia al eco que a la tonada

mi alma escribe poesía 5D
llena de música y perfumes
aunque su película favorita es olor a caño

se le confunden la paranoia con la intuición arcaica
regresa al patio del colegio
hasta estornudar vomitar sudar cagar sangrar
aquella primera conjugación

tanta ansiedad en el aire no impide suspiros
ni olvida la cabeza en la pila de bautismo

mea culpa por ser afortunada

mea culpa
el barro diciéndome
otra vez:
                   más puede la costumbre que el amor







24/2/14

Le pido comprensión al silencio

Junto a la ventana, que trasluce el saludo verde de una brisa difícil de ignorar, me dejo pervertir por esta mecedora.

22/2/14

perdóname, Tolstoi

el tiempo acentúa la sensación de que estamos hechos menos de paz
y más de guerra
Un montón de voces chillándome la tierra 
Otro las nubes, en ese Disney olvidado que se muere de frío esperando la resurrección
Por eso me va mejor lo cremado que lo congelado. Las cenizas vuelan 
si el viento las empuja
O pueden navegar hasta la orilla
si arrojadas al mar se hacen escritura: 
de la arena venimos y a la arena regresamos
Pero lo congelado se queda ahí pasando frío
alguien se da cuenta que ya Walt no quiere regresar a este mundo

sino dejarse derretir por el fuego
del
más
bajito

ya no queda nombre para tanta identidad

sólo un brindis de carencias
y citas ciegas   Por la cebra  Por su Yin Yang en cueros